“Welcome to Fabulous Las Vegas”, el sueño de hacerse rico en sus casinos, espectáculos, bodas poco comunes, fiestas y mucho más… ¿Qué más se puede decir? 

El autor de la novela Fight Club, publicada en 1996, Chuck Palahniuk, escribió: "Las Vegas se ve de la forma en que imaginas que el cielo debe verse de noche"; muchos otros dirían que se podría decir lo mismo del infierno. Independientemente, ningún lugar en la Tierra tiene la mística de Las Vegas: su nombre por sí solo es sinónimo de hedonismo, pecado y exceso. Realmente tienes que ir al menos una vez, aunque solo sea para jurar que nunca volverás. 

De esta manera crear una guía completa de Las Vegas es imposible. Mil y uno de todo abarrotan las calles: pizzerías, hamburgueserías, bares, espectáculos gigantes y sobre todo casinos. Uno podría pasar años allí y aún no conocer todos sus secretos. 

Los casinos son la alternativa para los adultos que quieren divertirse, pero ya no pueden ir a los juegos infantiles llenos de niños (pues se vería muy raro), ya que es probable que empieces a sentir que estás en el set de una película de James Bond, codeándote con supervillanos, millonarios excéntricos y agentes secretos en plena misión. 

Esta práctica ha logrado sobrevivir no solo porque arriesgarte a perder todo tu dinero te da un golpe de adrenalina, sino también porque es divertido. Aunque sea por un momento te permite olvidarte del resto de tus problemas, y por eso no vas a encontrar relojes o ventanas por ningún lado. Eso es algo que todos necesitan de vez en cuando.  

En Hollywood, los casinos aparecen por todos lados, desde las películas del cine clásico en las que Humphrey Bogart o, más recientemente, George Clooney, iban de traje y corbata a todos lados, y sacaban sus mejores looks para una noche de apuestas, hasta las películas de acción en las que siempre encuentras a un villano derrochando su fortuna en las mesas de blackjack, y eso les dio una reputación como el lugar al que los adultos van cuando se sienten con suerte.  

En el mundo real, tal vez creas que los casinos son para tus tías mayores que no tienen nada que hacer o para las despedidas de solteros en las que el exceso de alcohol que te lleva a tomar muy malas decisiones. Pero eso es solo porque no has visto los casinos más increíbles que alberga Ciudad del Pecado, como lo es hotel-casino Bellagio cuna de grandes figuras del póker que bien le han dado fama para que se celebre uno de los mejores campeonatos de ese juego, el World Poker Tour. Dicen que quien entra en él llega incluso a perder la noción del tiempo. 

Inaugurado en 1998 y con un costo total de 1.600 millones de dólares, el Bellagio fue el hotel más caro que se construyó hasta el momento. Habla por sí mismo, con su imponente lago artificial con show de luces, agua y música, un espectáculo permanente del Cirque du Soleil, su lujoso spa y casi 4.000 habitaciones dentro de las singularidades del Bellagio que sirven de gran atractivo al turismo, considerado para muchos especialistas, el mejor casino del mundo. 

Su ubicación es simplemente inmejorable, justo en la Strip de Las Vegas, la zona más visitada de la ciudad. Está enfrente de la enorme réplica de la Torre Eiffel que tiene el Hotel París. 

Las Fuentes del Bellagio

Son un show que ha ayudado que el nombre del hotel esté en boca de todos, y se convierta en un lugar turístico, y no sólo para quienes quieran alojarse en el hotel o visitar el casino. Las fuentes tienen más de 1.200 chorros de agua que danzan al ritmo de las 30 canciones que forman el repertorio, que con las luces robóticas que complementan el show se convierte en algo que atrae a miles de turistas cada día. 

Cada sesión dura entre 3 y 6 minutos, dependiendo de la duración de la canción, ya que están programadas para adaptarse y actuar a su ritmo. Desde su inauguración las fuentes funcionan todo el día, desde el mediodía hasta el amanecer, y lo más recomendable es visitarlas avanzada la noche, alrededor de las 11 de la noche. 

Su importancia en la tradición de la ciudad ha ido subiendo tanto que incluso se ha convertido en el punto donde las parejas recién casadas en Las Vegas van a celebrar y tomarse fotos. 

El conservatorio del Bellagio 

Otro rasgo distintivo. Se trata de un espectáculo exclusivo de Las Vegas. Seis millones de plantas, más árboles gigantes, elementos acuáticos, iluminación, mariposas y pájaros han cruzado el piso de 4 mil metros cuadrados del Jardín Botánico y Conservatorio Bellagio en los últimos 20 años. 

Si suena como una empresa monumental, lo es. Antes de montar cada una de las cinco exhibiciones anuales del invernadero, se cambian por completo todas la plantas. Las únicas estructuras permanentes son pasillos de mosaicos, bordillos de concreto alrededor de los jardines y un obelisco de cristal de cuarzo de 5 metros de altura. Se necesitan 125 empleados, trabajando en tres turnos las 24 horas del día durante seis días, para hacer un cambio. 

El Bellagio en el cine 

Como cualquier hotel emblemático, el Hotel Bellagio de Las Vegas ha tenido sus apariciones en el cine, y en el caso de este hotel, lo ha hecho con gran éxito. 

El Bellagio fue la sede de gran parte de las escenas de Ocean’s Eleven, donde George Clooney y Brad Pitt, entre otros, trataban de robar una fuerte cantidad de dólares de su bóveda subterránea. La versión original de esta película con Frank Sinatra había tenido su trama en el mismo hotel. 

La primera película de la saga Jason Bourne, The Bourne Identity, tuvo una escena en donde se puede ver al Bellagio de fondo. 

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